Encuentra vuelos baratos desde Madrid a Israel a partir de 83€

Facturación muy buena ; como ya es sabido tonteras Israeli, pues son como son

La puntualidad fue excelente, llegamos 10 minutos antes, las opciones del menú eran todas bastante cutres y poco saludables, la amabilidad de los auxiliares muy justa, no oí un sólo gracias o por favor, y su actitud dejaba mucho que desear .

Ha sido la vuelta muy bien y a tiempo, gracias

Uber no nos envió las tarjetas de embarque y no pudimos acceder por la zona de tránsito, sino que tuvimos que salir y pasar de nuevo por los controles de seguridad para ir al mostrador (sin necesidad porque no llevábamos equipaje para facturar).

Hice mi web checkin, me generó mi pase de abordar y en la puerta del avion me dicen que en el sistema no resultaba como facturado, me tuvieron que volver a facturar en el momento y cambiando tambien mi número de asiento. Afortunadamente la chica del personal de Iberia tuvo muy buena actitud y lo resolvió de inmediato.

Retraso de salida de 50 minutos Sin explicaciones Avión sin aire acondionado Todos sudando.... Sin opción, a comer prácticamente todo agotado Cerveza caliente Y con el considerable retraso en llegada de 40 minutos... Avión viejo, sin informar en pantallas y el piloto sin explicaciones en ningún momento. Billete caro, para lo obtenido, elegiré otra compañía sin duda. Fue una vergüenza 🤦‍♀️

Pésimo todo. me cancelaron el vuelo, exijo me devuelvan el dinero.

En este vuelo ya hubo comodidad, buena comida, buen entretenimiento y bebidas. Había, además, cosas a la venta, pero no se quedaron solo en vender, sino también hubo cosas buenas free.

No dan auriculares/audífonos, hay que comprarlos a 3 euros, y no sirven desayuno. La cena sí estuvo muy rica y el resto del vuelo muy bien

No habia donde cargar el movil y eso si fue feo ya que los 2 vuelos era igual

No pude viajar porque me cambiaron de horario ya solicité una devolución de la cual no tengo retorno aún

No se cual sería la política de la comida con respecto a la duración del vuelo. Para una duración de nueve horas sirvieron una comida y el resto tenias que pagar. Los audífonos también tenias que comprarlos y no tenian mucha variedad de películas. Del resto resto bien, viajas tranquilo.

Los asientos muy juntos con poco espacio y la comida mal.

Me gustó la atención del personal abordo. No me gustó que los asientos están muy juntos, es muy incómodo viajar tantas horas tan apretados.

Clase business, Cena buena. Snack antes de aterrizar (vuelo de 11 horas) de cantidad mínima.

Estuve en la sala VIP. Las camareras te quitan los platos de la mesa sin haber terminado. Hay un ansia terrible por que termines. En el vuelo, volaba en Turista Premium. Pedi una botella de agua y no me la dieron. Y el servicio de comida que dan una hora antes del vuelo, tampoco lo dieron

Siempre he fidelizado con Iberia, mis ultimas experiencias han sido peor que malas. Aviones sucios, comida insulsa, y como viajo o en business o en turista premium, tripulación que NO te deja dormir, mientras en la “cocina” se cuentan los chimentos del dia!

Salvo el pre embarque que siempre es malo en este tramo, todo bien

Tuvimos problemas de embarque. Cuando ya estabamos todos y pasado el horario de embarque se nos informo cambio de avion y puerta. Un desbande total!!! En la pantalla jamas aparecio la nueva puerta

La experiencia estuvo en lo esperado con observaciones acerca de la comida a bordo.El vino tinto que se sirve en premium tiene una baja calidad y lo mismo se puede decir del sándwich que dan antes de aterrizar. No es entendible que no den algo más sano y nutritivo

Mucha colo , no respetan su salida de vuelo en todos, la tripulación malazo, lo más malo nuetras maletas no llegaron con nosotros, nos dijeron que escribamos a una página para que nos los manden en 2 o 3 día!?🥺😱

Tuvimos un excelente vuelo. Lo q no me gustó es el poco espacio entre los asientos

No muy bueno los asientos son muy incomodos, en todo el viaje solo nos dieron una botellita de agua.

Mucho ruido, a menudo causado por el volumen de voz de los tripulantes que no paraban de charlar. Pésimos refrigerios para, un vuelo de 12 horas.