Hablar de Toronto es hablar de diversidad, de cultura, de mestizaje, de luz, de arte, de naturaleza y, por supuesto, de diversión. Es una de las ciudades más conocidas y populares de Canadá. Una urbe rebosante de vida que no deja indiferente a nadie, con decenas de lugares que visitar y cosas interesantes que hacer, tanto si viajas en pareja como solo, con amigos o en familia. En este artículo, precisamente, te contaremos qué ver Toronto durante tu estancia.
Toronto es una ciudad moderna y cosmopolita, pero aún conserva edificios con mucha historia. Se trata de un lugar donde puedes disfrutar del arte en las calles y también en modernos museos, una bulliciosa urbe que combina construcciones vanguardistas con tranquilas zonas verdes donde relajarte y disfrutar del aire libre. Además, cuenta con auténticas maravillas naturales muy cerquita de la ciudad. ¿Te atreves a conocerla?
Cosas que ver en Toronto: espacios imprescindibles

El hecho de que Toronto sea la ciudad más grande de Canadá y el centro financiero del país ha propiciado que sea un lugar en el que parte de su atractivo turístico se enfoca en lugares de construcción moderna y vanguardista, como el gran centro comercial Eaton Mall, el singular Path o el vibrante Scotiabank Arena, entre otros. Aunque también hay edificaciones con mucha tradición e historia, como el Elgin & Winter Garden Theatre Centre. De esta singular mezcla de espacios actuales y lugares históricos, hay varios que destacan especialmente y que debes conocer.
CN Tower

Si hay una construcción icónica en Toronto, esa es la CN Tower. Sin ninguna duda. Es todo un emblema de la ciudad. La Canadian National Tower, con sus 553,3 metros, es la torre de radiodifusión más alta de América. Esta torre, situada en el centro de la ciudad, se puede visitar. De hecho, es muy pero que muy recomendable. Desde el mirador que hay ubicado a 447 metros de altura tienes unas vistas realmente espectaculares de la ciudad.
Actualmente, es uno de los edificios más visitados de Toronto. Cada año pasan por allí más de dos millones de turistas. Además del observatorio, la torre CN cuenta con un restaurante giratorio a unos 350 metros de altura. Y para los más atrevidos, existe una plataforma exterior sin barandillas por la que puedes dar un paseo… asegurado con un arnés, eso sí. Es el Edge Walk.
El antiguo ayuntamiento y la catedral de San Miguel

Uno de los lugares con más historia de la ciudad de Toronto es el Old City Hall, el antiguo ayuntamiento. Se construyó en el año 1899 y, sin lugar a dudas, es uno de los edificios más bonitos de toda la ciudad. Actualmente, sus instalaciones albergan las cortes judiciales municipales, ya que el ayuntamiento se trasladó a un edificio más moderno en 1965, el actual Toronto City Hall, que, por cierto, se construyó muy cerca del antiguo.
La catedral de San Miguel es otro de los edificios históricos de la ciudad. De hecho, es una de las iglesias más antiguas y de las más bonitas. Su construcción data de 1848, momento en el que se consagró. Además de este templo, hay otros que también merece la pena visitar, como la catedral de Santiago o la Trinity-St. Paul’s Iglesia Unida.
La casa Loma

Loma House, que es como se conoce allí a la casa Loma, es una espectacular mansión situada en un barrio algo alejado del centro de Toronto. Está construida sobre una pequeña colina, de ahí su nombre. Hoy día, esta construcción, que en su día intentó ser una réplica del castillo de Balmoral ubicado en Escocia, se ha convertido en toda una atracción turística. Actualmente, está abierta a las visitas, y su interior alberga un museo. Es uno de los enclaves más emblemáticos que hay que ver en Toronto sí o sí.
La casa, que cuenta con nada menos que 98 habitaciones, fue mandada construir a principios del año 1900 por Henry Mill Pellatt. Dicen que este hombre, que era multimillonario, acabó arruinado a causa de los grandes gastos que costaba mantener la vivienda.
Yonge-Dundas Square

Si lo que buscas es un lugar lleno de vida donde sientas el bullicio y el vibrar de la ciudad, acércate a conocer Yonge-Dundas Square. Esta plaza, ubicada en pleno distrito financiero de la ciudad, es uno de los puntos más concurridos de las calles de Toronto, algo que no es de extrañar, ya que si a una céntrica plaza, donde se celebran eventos públicos a menudo, le unes unas fuentes, grandes carteles de neón y pantallas publicitarias luminosas, obtendrás uno de los rincones urbanos más populares y fotografiados por los visitantes.
Muy cerca de la plaza puedes visitar otros puntos de interés. Por ejemplo, el Toronto Eaton Centre, el cine Ed Mirvish y la sede de Citytv. Por cierto, algunos la conocen como Yonge Square y otros por Dundas Square. Y es que está ubicada justo donde confluyen las dos calles.
La palabra Toronto y Nathan Phillips Square

Hablando de lugares perfectos para hacerse fotos, otro de los puntos más fotografiados de la ciudad es Nathan Phillips Square, donde puedes posar junto a unas letras gigantes que forman la palabra Toronto. Esta plaza está ubicada justo frente al Toronto City Hall (el nuevo ayuntamiento).
Además, en este lugar hay fuentes y un pequeño estanque rectangular de poca profundidad que cuando llega el invierno, se congela, de modo que Nathan Phillips Square se convierte en una gran pista de patinaje sobre hielo que hace las delicias de vecinos y visitantes. En esa época, en la plaza se organizan multitud de actividades y celebraciones, lo que hace que se concentren aquí miles de personas cada día. Sobre todo, en jornadas festivas muy señaladas, como, por ejemplo, Año Nuevo.
Los barrios más emblemáticos de Toronto

Más allá de estos edificios concretos, todos ellos relevantes a la hora de organizar un plan de qué ver en Toronto durante unas vacaciones, hay algunos barrios, distritos o zonas de la ciudad que son un atractivo en sí mismos. Es decir, zonas por las que podemos perdernos con una idiosincrasia propia. Lugares en los que, simplemente, hay que pasear, observar, fotografiar y sentir cómo van atrapándote poco a poco. Eso sí, si puede ser, visita estos barrios sin mirar mucho el reloj: así disfrutarás mucho más.
Chinatown

El barrio chino de Toronto está localizado entre las calles Spadina y College. Aquí te sentirás como si, de repente, te hubieras transportado a algún punto de Asia. Obviamente, es donde mejor podrás saborear la gastronomía asiática. Además, es una buena zona para visitar si quieres comprar algún souvenir. Aquí son mucho más económicos que en las tiendas del centro. Una curiosidad: no busques las típicas puertas rojas que dan paso a los barrios chinos de la mayoría de las ciudades del mundo. Aquí no las encontrarás.
El Chinatown de Toronto es uno de los barrios con personalidad propia que más terreno ocupa. De hecho, está considerado uno de los barrios chinos más grandes de Norteamérica.
Kensington Market

Y paseando desde el barrio chino llegarás a Kensington Market, otra de las zonas con más personalidad de Toronto. Y es que este barrio con aire hípster está ubicado justo detrás de Chinatown. Es un lugar muy bohemio, muy frecuentado por universitarios, pintores, músicos callejeros y toda clase de artistas.
En sus calles encontraremos, además de mucho color, alegría y ganas de vivir, tiendas de segunda mano, cafeterías con encanto, galerías de arte, establecimientos donde probar platos tradicionales elaborados como en casa, grandes murales, comercios alternativos… ¡Ah!, y una vez al mes algunas de sus calles se cortan al tráfico para montar un mercadillo al aire libre con puestos de comida y actuaciones en directo.
Distillery District

Otro barrio que no puedes dejar de visitar en Toronto es el conocido como Distillery District. Se trata de una antigua zona que estaba repleta de fábricas y almacenes, actualmente reconvertida en el barrio más de moda de la ciudad. Concretamente, eran destilerías y licorerías, de ahí el nombre, que, con la imposición de la Ley Seca, quedaron abandonados y en desuso.
Aquel decadente barrio de calles adoquinadas y grandes edificios de ladrillo rojo alberga hoy día algunos de los mejores restaurantes de la ciudad, galerías de arte y tiendas de alta costura. Un espacio perfecto para pasear, tomar un café y disfrutar de alguno de los espectáculos que se organizan en sus espacios teatrales.
Disfrutar de la naturaleza en plena ciudad

Es maravilloso visitar monumentos y edificios emblemáticos, caminar por barrios singulares y comer en restaurantes típicos. Pero si hay algo necesario en cualquier escapada, es relajarse un ratito rodeado de naturaleza. De ahí que cada vez que prepares un viaje, unas vacaciones o una visita a una nueva ciudad busques esos parques, jardines y espacios naturales donde apartarte un poco del bullicio, llenar los pulmones y reconectar con uno mismo y con la naturaleza.
Y precisamente existen varios rincones verdes que merecen estar entre los primeros puestos de la lista de cosas que ver en Toronto. Hay tres en particular que te recomendamos especialmente; no obstante, Canadá es un auténtico paraíso natural, por lo que no te será difícil encontrar parques, jardines, bosques y todo tipo de parajes naturales.
Jardín Botánico de Allan Gardens

Uno de los jardines más bonitos de Toronto es el Jardín Botánico de Allan Gardens. Este jardín, que cuenta con hasta seis invernaderos, decenas de árboles diferentes y un sinfín de hermosas flores, se puede visitar de forma gratuita durante todo el año, cosa que es todo un acierto. Además, tiene una zona de juegos infantiles y un parque para mascotas donde podrás soltar a tu perro para que corra libremente.
Allan Gardens es uno de los parques más antiguos de Toronto. De hecho, se abrió al público allá por 1860. También es uno de los más amplios. Ubicado en el centro de la ciudad, sus instalaciones abarcan toda una manzana. Si te animas a visitarlo, no dejes de entrar al invernadero que guarda las orquídeas. La colección que podrás ver allí es realmente preciosa.
High Park

Como hemos dicho, en Toronto hay muchos jardines y parques. Pero el auténtico pulmón verde de la ciudad es el conocido High Park. Este parque urbano, que más parece todo un bosque en medio de la gran urbe, está ubicado en el centro de Toronto. Este espacio de titularidad municipal está considerado parque mixto por su carácter recreativo y natural. Cuenta con algunas instalaciones para practicar deporte, además de espacios donde realizar eventos culturales o actividades educativas.
Adentrándonos en High Park, nos encontraremos con algunos cuidados jardines, zonas de juegos para los más peques y hasta un parque de animales. También tiene zonas de aparcamiento y áreas donde disfrutar de un pícnic cómodamente. Todas estas cosas son las que hacen que este parque sea recreativo. No obstante, aún se conserva un tercio del parque en su estado natural.
Las islas de Toronto

Las islas de Toronto son un grupito de unos 15 islotes situados en el lago Ontario. Se ubican muy cerca del Downtown y están todas conectadas entre sí por puentes y pasarelas. Es un lugar perfecto para alejarse del frenesí del centro de la ciudad y disfrutar de un ratito de relax. Además, desde la zona de las islas podrás observar la línea del horizonte de la canadiense ciudad de Toronto como desde ningún sitio. La mejor hora para que te acerques a conocer el parque natural de Toronto Islands es al atardecer: con los colores de la puesta de sol, las vistas son realmente espectaculares.
Aprovecha la visita a las islas de Toronto para hacer un poco de senderismo entre ellas, hacer un pícnic junto al lago, practicar alguna actividad náutica o, incluso, si hace buena temperatura, darte un bañito en alguna de sus playas. Eso sí, para ir hasta allí tendrás que coger un ferri.
Museos y exposiciones que visitar en Toronto

No a todo el mundo le gusta visitar museos. Es una realidad. No obstante, ampliar nuestros horizontes culturales siempre es un buen plan. Vayas donde vayas. Y tanto los museos como las exposiciones son lugares perfectos para ello. Siempre aprenderás cosas nuevas, lo que te ayuda a abrir la mente y a conocer mejor la ciudad que visitas, su historia, sus tradiciones, su cultura y sus gentes. Encontrarás muchos museos y exposiciones que ver en Toronto, aunque, obviamente, no podrás verlos todos en un solo viaje, así que vamos a nombrar aquellos imprescindibles.
ROM

Tanto si viajas solo con adultos como si te acompañan peques, el ROM siempre es una gran opción cultural. El Royal Ontario Museum es el mayor museo de historia natural del país. Cuenta con una espectacular exposición de dinosaurios y fósiles, donde destacan los hallazgos de fósiles obtenidos en la excavación del esquisto de Burgess, donde se han observado más de 150.000 especies diferentes. Además, en sus salas también se custodian importantes muestras de arte africano y de Oriente Próximo.
Los miércoles por la tarde, en una franja horaria de unas dos horas, se puede visitar el museo de forma gratuita. Pero el museo es tan grande que en ese tiempo no podrás visitarlo entero. No obstante, tratándose de un museo tan importante y reconocido nacional e internacionalmente, las entradas tienen un precio bastante adecuado.
Art Gallery of Ontario

Si disfrutas con el arte, en tu lista de qué ver en Toronto no puede faltar AGO, la Galería de Arte de Ontario. Se trata de una de las mayores pinacotecas del continente americano. Se dice que, actualmente, su fondo museístico cuenta con más de 100.000 obras datadas desde el siglo I d. C. hasta la actualidad. Todo un referente en el mundo del arte mundial.
La Art Gallery of Ontario tiene una valiosa colección de obras de artistas canadienses, además de una gran colección de arte moderno y contemporáneo. Y no solo eso, sino que también encontrarás espacios dedicados a la escultura y otros enfocados en el arte a través de la fotografía. Todo ello convive junto a las exposiciones temporales, que son uno de los mayores reclamos del museo. Además, en sus instalaciones suelen organizarse eventos y actividades de lo más diversas, lo que convierte a esta galería en un espacio vivo.
El street art de Toronto

Hoy día, a la hora de hablar de arte y de pintura no podemos dejar de lado el arte callejero (street art), un movimiento en continua expansión que llena de color las calles de pueblos y ciudades de todo el mundo. Y Toronto no iba a ser una excepción.
Toronto cuenta con varias calles y zonas de la ciudad en las que los artistas han dado rienda suelta a su creatividad en muros, fachadas y otros elementos callejeros, conformando así un auténtico museo al aire libre. De entre todos los lugares de Toronto en los que podrás ver grandes murales pintados, hay dos que merecen una especial atención:
Graffity Alley: Se trata de una calle de unos 200 metros de largo de los alrededores de Chinatown que está completamente decorada con grafitis y murales alternativos.
Queen Street: Esta otra calle, mucho menos conocida, está repleta de bares. Y de grafitis. Además, hay otras muestras de arte libre, como esculturas o árboles adornados.
Disfruta la gastronomía callejera de Toronto

Visitar tantos lugares chulos seguro que te acaba abriendo el apetito, así que nada mejor que buscar esos lugares donde podrás probar platos tradicionales y típicos, comprar productos locales o disfrutar del sabor y el ambiente de la comida callejera. Para ello, lo mejor es visitar el mercado más importante de la ciudad: Sant Lawrence Market.
En el mercado de Sant Lawrence, además de los puestos de frutas, verduras y demás productos, en una zona de tipo patio interior hay pequeños bares donde podrás comer por muy poco dinero. Por cierto, este lugar merece una visita solo por su arquitectura. El edificio de ladrillo rojo que lo alberga es precioso. Y una curiosidad más: ¿sabías que en 2012 obtuvo el reconocimiento de Mejor Mercado de Comida del Mundo?
Qué ver en Toronto en un día

En este artículo hemos mencionado algunos de los lugares más emblemáticos de la ciudad. Los que no deberías dejar de conocer. Pero para poder visitarlos todos, lo más probable es que necesites al menos un par de días o tres. Si lo que necesitas es saber qué ver y qué hacer en Toronto en un día solamente, te recomendamos que te centres en estos lugares:
- El Mercado Kensington
- El barrio chino
- St. Lawrence Market, donde puedes aprovechar para comer
- La catedral gótica de St. James
- Yonge-Dundas Square
- Las islas de Toronto al atardecer
- La CN Tower, si no te dan miedo las alturas
Cómo moverte por la ciudad

Está claro que la mejor forma de explorar una ciudad es caminando. Pasear por las calles de Toronto es posiblemente la mejor forma de captar su esencia, ya que te permite observar todo a tu propio ritmo e ir descubriendo rincones que de otra forma no conocerías. Pero Toronto es una ciudad enorme y, aunque camines mucho explorando los diferentes barrios, tendrás que coger el transporte urbano para poder desplazarte más fácil y rápidamente de una zona a otra. La mejor opción, sin duda, es el metro.
Lugares imprescindibles en los alrededores de Toronto

No siempre disponemos de todo el tiempo del mundo para nuestros viajes. Si vas a estar poco tiempo en Toronto, tendrás que priorizar. Puede que no puedas conocer los alrededores de esta ciudad canadiense, pero igualmente te recomendamos que visites algunos lugares a pocos kilómetros que son imprescindibles y merecen incluirse en la lista de qué hacer en Toronto: las espectaculares cataratas del Niágara, los acantilados de Scarborough Bluffs Park y Algonquin Park, con sus más de 2400 lagos.
Cómo llegar a Toronto

Si has pensado visitar Toronto y sus alrededores, la mejor opción es llegar hasta allí en avión. El Aeropuerto Internacional Toronto-Pearson (YYZ) está ubicado a poco más de 30 km y hasta él llegan, diariamente, vuelos procedentes de todas partes del mundo. De hecho, hay vuelos directos desde España.
Cuando hayas aterrizado en el aeropuerto, tienes diversas opciones de transporte para llegar hasta la ciudad. Lo más rápido es el tren. Concretamente, tendrás que coger el Union Pearson Express (UP Express), que te deja en Toronto en apenas 25 minutos. También hay varias líneas de autobús que van del aeropuerto al centro, pero la mayoría tardan más tiempo.
No obstante, si vas a estar muchos días explorando la zona y no solo en la ciudad, alquilar un coche es otra buena opción. Así podrás ir a tu aire, cómodamente y sin depender de horarios.
Si ya estás pensando en tu próximo destino después de conocer Toronto, descubre lo que no te puedes perder en ciudades como Roma, Milán, Cinque Terre o Portugal.