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Qué ver en Roma en tres días: primer día

Por la tarde


Roma es mucho más de lo que tienes en mente o hayas podido imaginar. No obstante, es normal que lo que más te apetezca ver primero sea lo más famoso. Por eso, si estás preguntándote qué ver en Roma en tres días, te aconsejamos empezar por lo más característico. En este caso, la Fontana di Trevi es parada obligada. Si quieres, puedes seguir la tradición y arrojar una moneda. Eso sí, no olvides pedir un deseo.

Desde aquí, puedes echar a andar por la zona mientras te vas topando con otros monumentos que ya conoces. El Panteón, el Campidoglio o el Foro Romano son algunos de ellos. Por supuesto, no pierdas detalle de todo lo que vas observando, porque absolutamente cada rincón en Roma merece la pena. Aprovecha también para explorar el Monumento a Víctor Manuel II y los Museos Capitolinos. Es posible que no tengas tiempo de visitar estos últimos, pero, al menos, puedes admirar la fachada.

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Por la noche

Al caer la noche, hay algo mucho más que ver en Roma este primer día. El Coliseo de Roma es uno de los monumentos por excelencia de la capital italiana. Es pura magia y, por la noche, maravilla. Dedica un poco de tiempo a observarlo. Si te has quedado con ganas de más, no te preocupes, porque mañana podrás visitarlo. Este es solo un acercamiento al itinerario de Roma en tres días.

Te encuentras en una de las ciudades más bellas del mundo, así que, para que el momento sea perfecto, te recomendamos buscar un buen restaurante donde saciar el apetito. Esta zona es muy turística, de modo que no te será complicado identificar una excelente «trattoria». Si no lo sabes, una «trattoria» es el nombre que reciben los pequeños restaurantes de estilo italiano. ¿Qué puedes probar? Una ensalada «caprese», un «carpaccio», unos «gnocchi» o un «risotto», o arroz cremoso. Te recomendamos la Trattoria Pizzeria Luzzi dal 1945.

Segundo día: itinerario de Roma para el segundo día

Por la mañana

Amanece un nuevo día en la ciudad eterna y hay mucho que ver. Para comenzar la ruta de Roma en tres días, puedes empezar con la visita de los monumentos que viste la noche anterior. Entra en el Panteón, en el Foro Romano y en el Coliseo. Atraviesa la coqueta plaza Navona con sus bonitas fuentes y, si tienes tiempo, visita los Museos Capitolinos.

Los Museos Capitolinos datan del s. XV y albergan una serie de estatuas históricas. La mañana será frenética, pero siempre hay tiempo de más. Continúa hasta el foro de Trajano y no pierdas detalle del Palacio Bonaparte ni de la plaza Venecia. Detente también en la basílica de Santa María en Aracoeli, que data del s. XIII.

Por la tarde

Al planear qué hacer en Roma en tres días, debes incluir sí o sí un paseo por el Trastévere, considerado uno de los barrios con más encanto de la capital de la región del Lacio. Después del ajetreo de la mañana, ahora puedes deleitarte en esta caminata por un distrito de esencia tradicional. Para acceder hasta él, es tan fácil como cruzar por el puente Garibaldi.

Entre calles empedradas, edificios de colores y restaurantes y cafeterías tradicionales, irás topándote con algunos de los principales monumentos. Sin duda, el más famoso de este distrito es la basílica de Santa María en Trastévere. Esta iglesia de origen románico es muy pintoresca y se convertirá en uno de tus monumentos favoritos sin ninguna duda. Y si quieres comprar un suvenir o producto artesanal, aprovecha este paseo vespertino para hacerlo.

Por la noche

Para la noche, un buen plan es dirigirte a los alrededores de Villa Borghese. Puedes adentrarte en este espléndido parque antes de que la noche caiga. Una vez que haya oscurecido, puedes pasear por la plaza del Popolo, que acoge el obelisco de mayor antigüedad de la ciudad. Seguidamente, dirígete hacia las denominadas escaleras de la plaza de España, una zona que siempre está bastante concurrida.

Por aquí hay varios lugares de interés que ver en Roma en tres días. Por ejemplo, el Palacio Borghese o el Mausoleo de Augusto. Camina tranquilamente por el barrio hasta dar con un restaurante en el que sentarte a cenar. Si el día anterior cenaste pasta, hoy puede ser un gran día para cenar «pizza», por ejemplo, en el Ristorante Pizzeria Popolo Caffè. De postre, no te pierdas los magníficos helados italianos, de textura muy cremosa. Las heladerías más conocidas están en los alrededores de la plaza Navona, así que puedes llegar andando hasta allí.

Tercer día: qué ver en Roma antes de decirle adiós

Por la mañana

El último día de tu viaje es para dedicarlo por completo a la Ciudad del Vaticano. Afortunadamente, dispones de media jornada para explorar todo lo que alberga el considerado país más pequeño del mundo. Entre las atracciones turísticas, cómo no, están los Museos Vaticanos, la plaza de San Pedro y la basílica, donde se encuentra la capilla Sixtina.

Prácticamente toda la mañana se pasará volando en la pequeña, pero completa, Ciudad del Vaticano. Para llegar, lo más sencillo es ir en transporte público, en concreto, en Metro. Justo al lado del acceso, está la estación Ottaviano, idónea si quieres empezar visitando la basílica de San Pedro. En esta, te recomendamos ascender hasta la cúpula para admirar las vistas de la ciudad, aunque también puedes explorar las tumbas.

Por la tarde

Si has terminado la visita al Vaticano, estupendo: despídete, porque el siguiente y último punto de la ruta será el castillo de Sant’Angelo. Aunque no es tan conocido como otras atracciones, la realidad es que se trata de una visita imprescindible. Especialmente, llama la atención el puente de acceso al castillo, coronado por imponentes estatuas.

Hasta aquí qué ver en Roma en tres días. La realidad es que, con este itinerario, has aprovechado al máximo tu estancia en la capital, de manera que puedes pasar los últimos instantes degustando un capuchino o un «espresso» en cualquier cafetería de las proximidades de la Fontana di Trevi. Ahí arrancó tu viaje y ahí debe finalizar.

Cosas que debes saber antes de visitar Roma

Hay mucho que ver en Roma en tres días, así que trataremos en este itinerario de no dejar ningún rincón por explorar. La ciudad eterna es una combinación de historia, cultura y gastronomía que a ningún viajero deja indiferente. No olvides que existen dos aeropuertos que sirven a la ciudad, Ciampino y Fiumicino, por lo que recuerda consultar la ruta hasta tu alojamiento antes de aterrizar.

Roma es una urbe para conocerla a pie, así que lleva contigo calzado cómodo. Para evitar imprevistos de última hora, te recomendamos echar un vistazo al sitio web de restricciones de viaje durante su planificación. Lleva la cámara con suficiente memoria, pues Roma te va a alucinar. La cantidad de atractivos por metro cuadrado es impresionante.

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Dónde comer en Roma

Roma es una ciudad para disfrutar, no solo con la vista, sino también con el estómago. No en vano, la gastronomía es una parte fundamental de todo viaje a Italia. Uno de los restaurantes más interesantes es Osteria da Fotunata, localizado muy cerca de la plaza Navona. La pasta fresca es una de sus especialidades. También próximo queda Mr. 100 Tiramisu, excelente para probar el postre italiano más emblemático.

Dónde alojarse en Roma

Para tener a mano los principales monumentos y atractivos, te aconsejamos reservar tu alojamiento en la zona de la plaza Navona. Sin embargo, si buscas una experiencia más animada y auténtica, entonces, el barrio de Trastévere es para ti. El área de la plaza de España es, sin lugar a duda, una magnífica opción para estar bien comunicado con el resto de la ciudad.

Cómo moverse por Roma

Si te alojas en el centro, puedes desplazarte fácilmente a pie para visitar los monumentos, museos y calles principales. Sin embargo, si en algún momento del día te cansas de caminar, una alternativa es coger el Metro. El Metro romano es un sistema de transporte público con pocas líneas, lo que facilita de manera considerable su uso. Las líneas A y B son las que más utilizarás.

Acerca del autor

Andrea BarragánAndrea estudió Periodismo en la UCM y, desde hace varios años, combina sus dos grandes pasiones: escribir y viajar. Sin embargo, más que viajar, a ella le gusta experimentar la vida en cada país. Por eso, ha tenido estancias de varios meses en lugares tan increíbles como Georgia, Colombia o Asia Central. Hasta la fecha, ha conocido unos 40 países.

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