España es uno de los países más bonitos del mundo, ya que desborda historia y cultura por los cuatro costados. Gracias a su dilatada historia, tenemos la oportunidad de admirar una gran cantidad de monumentos y edificios singulares que están diseminados por todo el país. Pero España no solo es cultura, sino que ofrece unos espectaculares paisajes. Por ello, te recomendamos visitar las maravillas naturales de España para que admires la gran belleza de los paisajes españoles. Además, si quieres conocer en profundidad este hermoso país, puedes consultar la «Guía de viaje de España» en nuestra web.
Las maravillas naturales de España
Hay miles de maravillas naturales en España, y aquí tienes las que no puedes perderte.
1. Parque nacional de Timanfaya
Este parque se encuentra en los términos municipales de Yaiza y Tinajo, en Lanzarote, y está a una media hora en coche desde Arrecife. Puedes tomar la carretera LZ-67 para llegar, aunque también puedes coger el bus hasta Yaiza y, desde allí, coger un taxi hasta Timanfaya. Este espacio natural es conocido por sus montañas de fuego, originadas tras las erupciones volcánicas que se dieron en el sur de Lanzarote entre 1730 y 1736 y, luego, en 1824, que cubrieron de lava la parte meridional de la isla, modelando así la morfología del paisaje.
Así, en Timanfaya podrás ver uno de los mejores ejemplos de terreno volcánico sin vegetación, que te regalará espacios únicos, como el Charco de los Clicos, un lago que tiene un color verde radiactivo generado por el azufre y las algas. Te recomendamos reservar una ruta guiada por los volcanes y realizar un paseo en camello.
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2. Islas Cíes, Galicia
Estas islas gallegas forman parte del parque nacional Marítimo-Terrestre das Illas Atlánticas, y se han convertido en uno de los destinos más populares de la ría de Vigo. El archipiélago está formado por tres islas: Monteagudo, Do Faro y San Martiño. La única manera de llegar a las islas Cíes es por mar, por lo que puedes coger alguno de los ferris que salen en verano y Semana Santa del puerto de Vigo y hacen rutas diarias.
Cuando llegues a estas islas, quedarás maravillado al ver sus aguas cristalinas. Si te gusta el senderismo, puedes recorrer alguna ruta por la isla principal e ir parando en alguna de las preciosas calas. Y, si te gustan los deportes acuáticos, puedes practicar esnórquel gracias al Club de Buceo Illas Atlánticas y ver los ecosistemas de gran valor que hay en el fondo de las islas. Además, hay un camping donde puedes alojarte.
3. Las maravillas naturales de España: Parque nacional de Doñana
Este parque está ubicado entre las provincias de Huelva, Sevilla y Cádiz. Aunque puedes llegar en autobús desde ciudades como Sevilla a Matalascañas, te aconsejamos llegar en coche por la A-49. Una vez allí, te encontrarás con un amalgama de ecosistemas que poseen una biodiversidad increíble. Hay tres sistemas ecológicos: dunas móviles, marismas y cotos.
Destaca, sobre todo, la marisma, ya que es un lugar de cría y paso para miles de aves africanas y europeas. También en este parque hay especies protegidas, como el águila imperial ibérica o el lince ibérico, y especies autóctonas como el caballo marismeño. Si eres un amante de la aventura, este es un lugar inmejorable, porque podrás desarrollar numerosas actividades, como pasear a caballo, ir en 4×4, o practicar senderismo. Y, si prefieres relajarte, puedes ir a la playa de Doñana.
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4. Valle del Jerte, Cáceres
Este valle está situado al norte de Extremadura y le debe el nombre al río que discurre por él: el Jerte. Puedes llegar en coche o en autobús por la N-110, que atraviesa todo el valle. Los mejores meses para visitarlo son marzo y principios de abril, porque la floración está en su máximo esplendor. Así, podrás deleitarte con un valle cubierto por un gran manto blanco de las flores de los cerezos, lo que da comienzo a la Fiesta del Cerezo en Flor.
En el valle del Jerte puedes hacer rutas de senderismo y conocer algunos de sus pueblos con encanto, como es El Torno, desde donde obtendrás unas vistas maravillosas, o Cabezuela del Valle, municipio en el que podrás admirar la arquitectura popular. Otro de los atractivos del valle es la reserva natural de la Garganta de los Infiernos. También puedes darte un baño relajante en las piscinas naturales del río.
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5. Barrancas de Burujón, Toledo
Estas Barrancas se localizan en los términos municipales de La Puebla de Montalbán, Albarreal de Tajo y Burujón, justo en la orilla norte del embalse de Castrejón y a unos 30 km de la capital manchega. Para acceder a las barrancas, debes tomar la carretera CM-4000 y desviarte en el punto kilométrico 26 por una pista de tierra. Este enclave natural se ha formado por la erosión del viento y las aguas del Tajo sobre sedimentos de hace unos 25 millones de años,
lo que ha dado lugar a un paisaje único de cortados arcillosos que podrían recordar a los del Gran Cañón del Colorado. Para admirar mejor este bello escenario, dirígete a los miradores de los Enebros o el Cambrón. Además, podrás apreciar una gran diversidad ecológica con abundante vegetación que va desde almendros hasta sauces, así como diversas especies, como el búho real o el águila imperial.
6. Selva de Irati, Navarra
Esta selva está en pleno pirineo navarro y está enclavada entre los valles navarros de Salazar y Aezkoa y los franceses de Soule y Cize. Hay dos opciones para acceder a la selva. La primera es a través del valle de Salazar, por la carretera NA-2012, y la otra es a través del valle de Aezkoa, por la NA-2030. Aunque cualquier época es buena para ver la selva, recomendamos ir en otoño, porque es cuando la verás en todo su esplendor.
Se trata del segundo hayedo de mayores dimensiones de toda Europa, y se combina con abetos conformando un bosque muy frondoso. También es una Zona de Especial Protección de Avifauna donde podrás ver, por ejemplo, pájaros carpinteros o águilas reales. Si eres todo un aventurero, este es el lugar ideal, porque podrás realizar diferentes rutas de senderismo, dar paseos a caballo o descender por los distintos cañones.
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7. Nacimiento del río Mundo, Albacete
El nacimiento del río Mundo se sitúa al sur de Albacete, en el parque natural Sierras de Cazorla, Segura y las Villas, y es uno de los puntos naturales más bonitos de la región manchega. Para llegar a este paraje, debes ir hasta el municipio de Riópar (Albacete) por la CM-3204 y, desde aquí, el camino de acceso hasta el nacimiento está muy bien señalizado.
Un buen momento para visitarlo sería el otoño, porque es cuando los chorros del río Mundo revientan dejando una imagen preciosa. Para poder ver estos chorros hay que hacer una ruta de unos 3 km por unas escaleras talladas en la piedra. El esfuerzo merece la pena por el gran espectáculo que nos espera al llegar, una cueva de origen kárstico de la que surge una hermosa cascada. Sin ninguna duda, es un lugar ideal para los amantes de la naturaleza.
