Como todos sabemos, Italia es conocida por ser un auténtico espectáculo cultural, ya que está repleta de maravillosos restos arqueológicos romanos, edificios renacentistas y barrocos, y grandes plazas. Sin embargo, también es uno de los países más bellos del mundo por sus paisajes.
Los mejores lagos en Italia
Sería buena idea que visitaras los mejores lagos en Italia durante tu viaje. Recomendamos ir en primavera porque es cuando podrás ver los paisajes en todo su esplendor. Además, puedes consultar la guía de Italia para conocer más este país único.
1. Lago de Como
En la región de Lombardía y cerca de Milán está uno de los lagos más conocidos del norte de Italia. El lago de Como es espectacular, ya que se encuentra a la sombra de los Alpes réticos, entre montañas cubiertas de bosques. Recomendamos coger un ferri y visitar las poblaciones que hay en sus orillas. Una de ellas es Bellagio, situada sobre un promontorio en la bifurcación del lago, donde podrás ver preciosos campos de cipreses y jardines, o la Villa Serbelloni.
También puedes conocer Tremezzo y visitar la Villa Carlotta, desde cuyas terrazas podrás disfrutar de unas magníficas vistas. Si te gusta la aventura y quieres acampar en el lago, debes saber que no se permite la acampada libre, pero hay numerosos campings diseminados por la orilla. Y si visitas el lago en primavera o en verano, puedes nadar o practicar algún deporte acuático como el windsurf.
2. Lago Maggiore
Este lago alpino es el segundo más grande de Italia y uno de los más bonitos del país. Sus orillas se extienden por las regiones de Piamonte, Lombardía y una parte del sur de Suiza. El lago Maggiore está rodeado de montañas y bosques, pero por lo que se distingue es por sus islas, entre las que destacan las Borromeas. Para visitarlas puedes coger uno de los transbordadores que cruzan el lago y disfrutar del palacio Borromeo, además de exóticos jardines y maravillosas vistas.
Si quieres visitar las localidades de alrededor del lago, como Stresa, recomendamos ir en coche. Y aunque puedes alojarte en alguna de estas poblaciones, si te encanta la aventura, te recomendamos que te quedes en alguno de los campings para vivir una experiencia más completa cerca del lago, ya que varios cuentan con pequeñas playas donde bañarse.
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3. Lago de Orta
Paralelo al lago Maggiore y separado por el monte Mottarone se encuentra el lago de Orta. Este lago está enclavado en un paisaje espectacular rodeado de bosques oscuros, y gracias a su pequeño tamaño se puede recorrer en coche en un día. Una de las paradas obligatorias cuando vayas a verlo es el bonito pueblo medieval de Orta San Giulio, ubicado en la isla San Giulio, donde podrás ver un casco medieval lleno de calles empedradas, así como los frescos de la basílica di San Giulio.
Enfrente de la isla de San Giulio encontramos otro de los atractivos de este lago: el Sacro Monte de Orta, nombrado patrimonio de la humanidad por la UNESCO y desde donde disfrutarás de unas maravillosas vistas. Puedes alojarte en algún hotel de las localidades cercanas o en ciudades como Turín, pero en los alrededores del lago hay varios campings y alguno de ellos cuenta con una playa para poder darte un baño.
4. Lago de Garda
Este lago se encuentra en el norte de Italia, entre los Alpes y la llanura Padana, y baña tres regiones: Véneto, Lombardía y Trentino Alto Adigio. Es el lago más grande del país, y su particular clima hace que florezcan cultivos propios del sur de Italia, por lo que está rodeado de cipreses, olivos, viñedos, cedros y limoneros. Es uno de los más visitados de Italia por su gran oferta de turismo activo, por contar con numerosos alojamientos, tanto campings como hoteles, y por tener playas para el baño. Además, está muy cerca de la famosa Verona.
Entre las localidades que lo rodean destaca el pueblo de Sirmione, situado en una pequeña península y presidido por el castillo de Rocca Scaligera. Este lago también tiene islas, entre las que destaca la Isola di Garda, donde podrás admirar un espectacular monasterio del siglo XIII construido por petición de San Francisco de Asís. Además, recomendamos subir al teleférico San Michele para admirar unas preciosas vistas del lago.
5. Lago de Bolsena
Este lago está en la región del Lacio, entre Roma y la Toscana. En su interior se encuentran las islas de Bisentina y Martana, a las que puedes ir en ferri. Destaca sobre todo la isla Bisentina, donde podrás ver numerosas iglesias, bosques de robles, así como una costa bordeada en parte por acantilados. Este lago está rodeado de localidades con encanto, como Tuscania o Bolsena, pueblos en los que sus habitantes siguen pescando de forma tradicional, por lo que es muy aconsejable que comas en alguno de los restaurantes de la zona para probar un pescado de gran calidad.
Además, gracias a las aguas cálidas de este lago, puedes darte un baño o, si eres un apasionado de los deportes de agua, practicar alguno, como el kayak. Y para alojarte, puedes hacerlo en alguna localidad de alrededor del lago, en un camping o en Roma, que está bastante cerca.
6. Lago de Trasimeno
El lago de Trasimeno está situado en el centro del país, en la región de Umbría, entre colinas boscosas llenas de viñedos, olivares y campos de girasoles. En este lago hay tres islas: la Polvese, la Maggiore y la Minore. La primera es un parque de investigación científica donde podrás ver aves y anfibios; la segunda apenas tiene dieciocho habitantes; y la tercera es una roca que da cobijo a cormoranes.
En las orillas del lago encontrarás pueblos como Passignano sul Trasimeno o Castiglione del Lago, donde verás el palacio Ducal y el fuerte de la Rocca del Leone. Si te encanta la naturaleza, te recomendamos que planees una ruta a pie o en bici alrededor del lago y acampes en alguno de los campings. También puedes pescar, hacer alguna excursión en barco o practicar algún deporte acuático, como el kitesurf.
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7. Lago de Iseo
Este lago es uno de los menos conocidos del norte del país, pero merece la pena visitarlo por sus aguas claras, sus montañas abruptas y su monumental ribera. Próximo a las ciudades de Brescia y Bérgamo, estamos ante un lugar tranquilo y apacible, ideal para desconectar en la naturaleza. En el centro del lago se erige la isla Monte Isola, a la que puedes llegar en alguno de los ferris que recorren el lago y en la que se encuentran dos de los pueblos más bonitos del lago: Carzano y Peschiera Maraglio.
Además, puedes aprovechar para subir a lo alto de la isla y visitar el santuario della Madonna della Ceriola, desde donde disfrutarás de unas espectaculares vistas. También tienes que visitar Iseo, pueblo que da nombre al lago, donde te maravillarás con la arquitectura local. No puedes irte sin darte un baño, y si te apasionan de los deportes de agua, puedes practicar alguno como la vela.
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8. Lago de Resia
El lago de Resia se encuentra en la región de Trentino Alto-Adige, en el norte de Italia, por lo que está rodeado de montañas con frondosos bosques. Sin embargo, su gran atractivo es la torre-campanario que emerge de sus aguas y le da un toque especial a este hermoso paisaje. La explicación es que cuando trasladaron la localidad de Curon Venosta para poder subir el nivel del lago, mantuvieron la iglesia como recuerdo de su pasado histórico.
Debes saber que en invierno, cuando el lago se congela, se puede llegar al campanario a pie. Además, si eres amante de la pesca, puedes practicarla, ya que hay numerosos peces, como el lucio o la trucha alpina. Y si te encantan los deportes, puedes practicar el nordic walking o el inline skating en la orilla del lago. Sin duda, un lugar único para desconectar y conectar con la naturaleza y la historia.
