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Múnich, capital de Baviera, es una de las ciudades más bonitas de Alemania. Esto es debido a su gran oferta cultural, ya que cuenta con numerosos monumentos y edificios históricos y museos. Sin embargo, Múnich no solo es historia y cultura, sino que también es una localidad ideal para probar la rica gastronomía alemana acompañada de una buena cerveza. Igual que Berlin, a pesar de que Múnich se puede visitar en un fin de semana, te recomendamos invertir más tiempo para ver algunos lugares de interés de los alrededores. Por todo ello, hemos elaborado una lista con las mejores atracciones turísticas que ver en Múnich para que aproveches al máximo tu viaje por esta hermosa ciudad.

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Principales sitios que ver en Múnich

En este artículo te ofrecemos una lista de los principales lugares de interés de la ciudad alemana de Múnich. Así, cuando vayas a visitarla podrás vivir una experiencia cultural completa.

1. Marienplatz

Marienplatz es el centro neurálgico de Múnich, el punto de encuentro para sus habitantes y para los turistas. El urbanismo de esta plaza es una auténtica maravilla arquitectónica, puesto que en ella podrás ver algunos de los edificios históricos más importantes de Múnich, como es el del nuevo ayuntamiento, o Neues Rathaus, de estilo neogótico.

Como dato curioso, debes saber que, a las 11:00, a las 12:00 y a las 17:00 h, se produce en este edificio la danza de Cooper, un espectáculo en el que las figuras de un carrillón bailan al son de la música. En Marienplatz, también podrás ver otros edificios, como el del antiguo ayuntamiento, o Altes Rathaus, la columna de Santa María (Mariensäule) y la fuente (Fischbrunnen). Además, en Navidad, en esta plaza se instala uno de los mercadillos navideños más antiguos de Europa, el Christkindlmarkt, donde podrás comprar adornos navideños y probar la comida típica navideña de Baviera.

2. Englischer Garten

Una de las mejores cosas que hacer en Múnich es ir a darse un paseo por el Englischer Garten, el parque más importante de la ciudad y uno de los parques urbanos más grandes del mundo. Aunque este parque puede visitarse en cualquier momento del año, te recomendamos que vayas en primavera o en otoño, porque podrás ver sus lagos, ríos y bosques en su máximo esplendor.

Si te encanta pasear o montar en bici, tienes a tu disposición casi 80 km de senderos para hacerlo. A lo largo del recorrido te encontrarás con diversas esculturas, una casa de té Japonesa, una torre china, un templo de estilo griego, así como dos biergartens (cervecerías al aire libre) donde puedes hacer un pícnic. Además, tienes que saber que, en una zona del parque, en concreto, en una parte del canal Eisbach, podrás ver a gente practicando surf, ya que en este lugar se crean las olas perfectas de manera artificial.

Dirección: Frauenplatz, 12, Múnich.

3. Iglesia de San Pedro, o Peterskirche

Esta iglesia es uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad y, además, destaca por ser el templo católico más antiguo del país germano. Cuando entres al templo, te sorprenderás al ver una increíble mezcla de elementos góticos, barrocos y rococós, entre los que destacan los frescos del techo, el altar mayor y el coro barroco.

También en el interior, concretamente, en la segunda capilla de la izquierda, se encuentra uno de los puntos que más atraen a los visitantes, el esqueleto enjoyado de santa Munditia, que está cubierto por oro y adornado con piedras preciosas. Otro de los elementos arquitectónicos interesantes de esta iglesia es la torre, de unos 56 m de altura, con su campanario renacentista. Te recomendamos subir los 306 escalones que tiene la torre, porque, en la parte superior, hay un mirador desde donde obtendrás unas vistas únicas de Marienplatz con Múnich de fondo.

Dirección: Rindermarkt, 1, Múnich.

4. Viktualienmarkt

Al sur de la iglesia de San Pedro, en pleno centro de Múnich, se localiza el Viktualienmarkt, el mercado al aire libre más popular de la ciudad. Se trata de un mercado de alimentos en el que unos 150 vendedores ofrecen diversos productos en sus puestos, como fruta, verduras, queso o flores, entre otros muchos. En un primer momento, este mercado se instalaba en Marienplatz, plaza en la que los campesinos ofrecían sus productos frescos y sus cereales a los ciudadanos.

Más tarde, a principios del siglo XIX, este espacio se quedó pequeño, por lo que se tuvo que trasladar a su ubicación actual. Una de las cosas que puedes hacer en este mercado es comprar comida típica alemana en algún puesto, como pueden ser las salchichas, o wurst, y llevártelas a uno de los biergarten (terraza típica de Baviera) que hay en los alrededores, donde las puedes acompañar de una rica cerveza.

Dirección: Viktualienmarkt, 3, Múnich.

5. Münchner Residenz

Münchner Residenz fue la residencia y sede del gobierno de los duques, electores y reyes bávaros desde 1508 hasta 1918. Con el paso del tiempo, los príncipes fueron transformando un castillo que había en la esquina norte de las fortificaciones de la ciudad en una increíble residencia. Tras la gran destrucción que sufrió este edificio durante la Segunda Guerra Mundial, se reconstruyó a partir de 1945.

Münchner Residenz ha estado abierta al público como museo desde 1920 y, actualmente, es uno de los museos de palacio más importantes de toda Europa. Una vez dentro de este palacio, podrás ver numerosas colecciones de arte que van desde el Renacimiento hasta la Edad Moderna, y acoge obras de todos los estilos artísticos de ese largo periodo, incluidos el gótico, el barroco, el rococó o el neoclasicismo. Esta residencia destaca por su arquitectura y por sus salas, decoradas con increíbles tapices, cuadros y muebles. Entre estas salas, no puedes perderte el Antiquarium, el Tesoro o la sala del Teatro de Cuvilliés.

Dirección: Residenzstraße, 1, Múnich.

6. Cervecería Hofbräuhaus

Si te encanta la cerveza, no puedes irte de Múnich sin ir a la Cervecería Hofbräuhaus, la cervecería estrella de la ciudad y una de las más famosas del mundo. Los orígenes de esta cervecería se remontan hasta 1589, cuando era la fábrica de cerveza que abastecía a la familia Wittelsbach. Fue en el año 1828, cuando esta fábrica fue trasladada de lugar y la cervecería abrió al público por decreto.

A partir de este momento, se convirtió en todo un punto de encuentro para ciudadanos y políticos. Durante la Segunda Guerra Mundial quedó totalmente destruida por los bombardeos y en 1958 se inauguró la construcción que hoy se puede ver en Múnich. Actualmente, pasan miles de personas cada día para comer algún plato típico alemán acompañado de una buena cerveza. Además, te recomendamos visitar esta cervecería durante la celebración del famoso Oktoberfest, ya que el ambiente se vuelve increíble.

Dirección: Platzl, 9, Múnich.

7. Catedral de Múnich

Otro de los edificios emblemáticos que no te puedes perder en tu viaje a Múnich es la catedral de Nuestra Señora de Múnich. Es un templo muy sencillo, pero gigante; de hecho, es una de las catedrales más grandes de Alemania. La catedral de Múnich se construyó en el siglo XV, es de estilo gótico tardío, y destaca por la presencia de ladrillo rojo en su fachada.

Te recomendamos entrar a verla, porque podrás apreciar unas increíbles vidrieras, el altar de San Andrés o la tumba del emperador Luis IV de Baviera. También, hay un punto de la catedral que atrae especialmente a los visitantes, la llamada Pisada del Diablo, localizada en el suelo de la zona de entrada bajo el presbiterio. Se trata de una huella de pie humana tallada en piedra, en la que, si pones el pie y miras hacia el altar mayor, no podrás ver ninguna ventana lateral.

Dirección: Frauenplatz, 12, Múnich.

8. Odeonsplatz de Múnich

Odeonsplatz es una de las plazas más bonitas y conocidas de Múnich, junto a la Marienplatz. Se localiza en el norte del barrio antiguo y está rodeada de importantes edificios y monumentos históricos. En la zona sur de esta plaza, encontrarás el Feldherrnhalle, un edificio clásico inspirado en la Loggia dei Lanzi de Florencia y que se erigió en el siglo XIX en honor al ejército bávaro.

En la zona este, se encuentra la iglesia de los Teatinos, construida a finales del siglo XVII en estilo barroco tardío italiano, que destaca por su imponente fachada. Se caracteriza por el color amarillo claro, dos grandes torres y una increíble cúpula. También impresiona el interior de la iglesia, ya que está decorado con estuco y columnas corintias y se mantiene, principalmente, en blanco. Además, Odeonsplatz limita con el Hofgarten, un precioso jardín de estilo renacentista, ideal para desconectar.

Dirección: Odeonsplatz, 1, Múnich.

9. Puertas de la Muralla de Múnich

Durante la Edad Media, la ciudad de Múnich estaba rodeada de una gran muralla. En la actualidad, se conservan tres de las cuatro puertas de acceso que tenía: la Puerta de Karlstor, la de Isartor, y la de Sendlinger Tor. Cabe destacar que la Puerta de Isartor, ubicada en Isartorplatz, es la más importante de la ciudad, porque, aunque se restauró, es la única que conserva los frescos originales y la torre principal.

La Puerta de Karlstor cambió su nombre original de Neuhauser Tor en honor al príncipe Carlos Teodoro, porque fue quien derribó la muralla en el siglo XVIII para que la ciudad pudiera extenderse. Se localiza en Karlsplatz, donde puedes ver también el Palacio de Justicia y la fuente central. Por su parte, la Puerta Sendlinger Tor es la más antigua de la ciudad y se ubica en el extremo sur del casco antiguo de Múnich.

10. Puerta de la Victoria, o Siegestor

La Puerta de la Victoria es uno de los monumentos más significativos de la ciudad. Forma el límite entre Ludwigsstraße y Leopoldstraße y se ubica justo al lado de la Universidad Ludwig-Maximilians. Esta Puerta de la Victoria es un arco de triunfo, que se construyó entre 1843 y 1850 para conmemorar la victoria del ejército bávaro sobre las tropas de Napoleón.

De hecho, en sus paredes es posible ver algunos relieves que representan escenas de este episodio. Tras la Segunda Guerra Mundial, tuvo que ser reconstruida y en su puerta principal se colocó la siguiente frase: «Dedicado a la victoria, destruido por la guerra, advertencia de paz». Uno de los atractivos de este arco de triunfo es la cuadriga de bronce que hay en la parte superior, formada por Baviera y cuatro leones. También, en esta puerta, en los medallones superiores, verás imágenes típicas de los distritos bávaros.

Dirección: Leopoldstraße, 1, Múnich.

11. Allianz Arena

Si te encanta el fútbol, no puedes irte de Múnich sin ver uno de los estadios más famosos del mundo: el Allianz Arena. En este estadio, juega sus partidos el F. C. Bayern de Múnich, uno de los equipos más laureados de Alemania y de Europa. Fue construido en 2005 y presentó un diseño revolucionario, ya que la piel exterior que envuelve el estadio está compuesta por casi 3000 paneles romboidales.

En la actualidad, estos paneles se iluminan al atardecer, la mayor parte de las veces en tono rojo, color del equipo, que hace lucir al estadio de manera espectacular. Te recomendamos que gires una visita por del estadio si quieres ver el museo del F. C. Bayern de Múnich y el espectacular terreno de juego.

Dirección: Werner-Heisenberg-Allee, 25, Múnich.

Qué ver en Múnich y alrededores

Si tienes tiempo, te recomendamos que te apuntes a alguna excursión para ver algún monumento de los alrededores de la ciudad. A continuación, te ofrecemos algunos sitios a los que puedes acercarte desde Múnich.

12. Castillo de Neuschwanstein

Una de las mejores cosas que ver cerca de Múnich es el castillo de Neuschwanstein, ubicado cerca de Füssen. Fue mandado construir en 1869 por Luis II de Baviera, el Rey Loco, y es un fiel reflejo de sus ideales, gustos y anhelos. Lo construyó como un lugar idílico en el que poder refugiarse y desconectar. De hecho, el castillo posee pinturas inspiradas en las óperas de Wagner, del que era gran admirador.

El castillo de Neuschwanstein tiene unas 200 estancias, entre las que destacan la Sala del Trono, la Sala de los Cantores o el dormitorio del rey y la capilla. Abierto al público desde 1886, este castillo recibe en la actualidad miles de visitantes de todo el mundo, lo que lo convierte en uno de los edificios más fotografiados de todo el país. Además, se dice que este castillo inspiró a Walt Disney para crear el castillo de la Bella Durmiente.

Dirección: Neuschwansteinstraße, 20, Schwangau.

13. Palacio de Linderhof

El Palacio de Linderhof está situado en un valle cercano al pueblo de Oberammergu, en el estado de Baviera. Este palacio fue mandado construir por Luis II de Baviera y es el más pequeño de los tres que ordenó edificar, aunque fue el único que vio terminado. Una de las cosas que más te llamará la atención de este palacio es su interior, en el que podrás ver numerosas estancias a cual más lujosa y que reflejan a la perfección los gustos del Rey Loco.

Entre estas salas, destacan las dos Salas de Tapices, el Salón de Espejos, y la Cámara de Audiencias. Sin embargo, la visita al palacio no termina aquí, porque este cuenta con un entorno natural único. Una de las zonas más increíbles son los jardines del sur del palacio, donde podrás ver un espectacular estanque con un gigantesco chorro de agua y el Templo de Venus.

Dirección: Linderhof, 12, Ettal.

Acerca del autor

Fátima Mora SeguraFátima es una castellano-manchega que ama su tierra y sus costumbres, pero sin olvidar sus raíces paraguayas. Apasionada del arte y la historia, le encanta estar en constante aprendizaje, por lo que en sus viajes realiza rutas o visitas guiadas, con el objetivo de sumergirse en la cultura del lugar, así como conocer su historia y leyendas. Revisa el Instagram de Fátima para inspirarte con sus viajes.

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