En Gran Canaria hay playa los 365 días del año. Este paraíso está a solo un par de horas de vuelo desde Madrid o Barcelona. Aunque los más de 60 km de playas son una excelente carta de presentación de la isla, hay mucho más que ver en Gran Canaria. Este coqueto enclave del archipiélago promete una experiencia vacacional muy completa, elijas el plan que elijas.
Si te gusta la naturaleza y los paisajes singulares, Roque Nublo se convertirá en tu excursión predilecta; mientras que si buscas un ambiente animado, no te pierdas la emblemática playa de Las Canteras. Aprende a desconectar en el Jardín Canario y pasea por las calles de la Vegueta, en el corazón de Las Palmas de Gran Canaria. Esto solo es un adelanto de un viaje inolvidable.
Lugares que ver en Gran Canaria que no puedes perderte
Gran Canaria es sinónimo de playas extensas, localidades que desprenden autenticidad, parques nacionales y piscinas naturales. Es un destino muy completo que ofrece actividades para todos los perfiles de viajero. ¡Por algo la visitan cuatro millones de turistas cada año! Descubre cuáles son los esenciales para no perderte ni una coma en tu próximo viaje al archipiélago.
1. Casco histórico de La Vegueta (Las Palmas de Gran Canaria)
Abrimos esta lista de lo mejor que ver en Gran Canaria con su capital. En concreto, vamos a poner el foco en La Vegueta, el corazón de la ciudad. Sus calles atesoran más de 500 años de historia y, por supuesto, fue en ellas donde se fundó Las Palmas de Gran Canaria. Entre sus atractivos, no te pierdas la casa de Colón, el Museo Canario o la catedral de Santa Ana.
Pero además de historia, La Vegueta es un barrio para disfrutar en sus plazas. Las del Espíritu Santo y de Santo Domingo son algunas de las más representativas. Para finalizar tu recorrido te proponemos sumergirte en el colorido del mercado de La Vegueta, que data de mediados del siglo XIX y está considerado uno de los más hermosos de todo el continente europeo.
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2. Playa de Las Canteras
Nos resistimos a abandonar Las Palmas de Gran Canaria, pues la capital isleña es especial. Entre sus rincones más característicos está, cómo no, la playa de Las Canteras. Esta bonita y cuidada playa urbana es de carácter familiar y siempre tiene el mejor ambiente. Y cuando decimos siempre es siempre, pues recuerda que en la isla hay playa durante todo el año.
Después de reposar bajo el sol, anímate a recorrer los 2 km de paseo marítimo y atraviesa heladerías, establecimientos comerciales y todo tipo de bares que miran al océano. Refúgiate en uno de ellos hasta que caiga el sol o mimetízate con la atmósfera surfera de cierto sector de la playa. Enseguida descubrirás por qué se considera una de las mejores playas urbanas de España.
3. Dunas de Maspalomas
El paraíso existe, es ondulado, suave y de tonalidades doradas. Las dunas de Maspalomas son un enclave que no te creerás del todo hasta que tus pies las rocen y tu vista las contemple. Se trata de un espacio natural de valor incalculable, un paisaje imposible de abarcar con los ojos. Atraviesa las dunas hasta llegar al océano y, entonces sí, te lo creerás un poco más.
Uno de los iconos de este rincón privilegiado es el faro de Maspalomas. Lo verás a lo lejos, pero siempre puedes llegar hasta él a pie. Con 55 m de altura, empezó a dar su luz a finales del siglo XIX. Otro punto de interés en este paraje es la playa del Inglés, otra de las más populares de la isla que, además, en cierto tramo es apta para practicar nudismo.
4. Roque Nublo
El Roque Nublo es uno de los símbolos por excelencia de la isla y, por supuesto, un enclave que ver en Gran Canaria. Este monolito de piedra se alza 1800 m sobre el nivel del mar y, según parece, en sus orígenes fue un espacio de culto para los aborígenes de la isla. Hoy en día, es el punto final de una caminata larguísima pero gratificante que comienza en el mirador de La Goleta.
Para desearlo, lo primero es verlo y, por eso, el sendero arranca en este observatorio. Por delante tienes algo menos de 2 km a través de una ruta empinada en algunos tramos y con escalones en otros. Pero, como sabes, al final todo tiene su recompensa y serás capaz de tocar y fotografiar este símbolo de Gran Canaria de 80 m de altura que se yergue imponente frente a ti.
5. Agaete
Si solo tuvieras tiempo para visitar un pueblo grancanario, te recomendaríamos Agaete. Este municipio situado al norte de la isla, a solo 30 km de Las Palmas de Gran Canaria, recibe al visitante con su bonito colorido y atractivos como el huerto de las Flores o la iglesia de la Concepción. Pero hay mucho más que ver en Gran Canaria y, en concreto, en este lugar.
Agaete es un destino para los amantes de los planes relajados, para quienes prefieren sentarse a disfrutar un plato típico de papas arrugás en entornos tan especiales como el puerto de las Nieves. Pero también es para quienes buscan una alternativa a las concurridas playas. En este caso, las piscinas naturales de Las Salinas se convertirán en el plan por excelencia.
6. Arucas
Solo un par de días en Gran Canaria pueden ser suficientes para descubrir cuál es la bebida más deseada de los locales. El afamado ron Arehucas, que está por todas partes, vayas donde vayas, es originario de esta localidad ubicada no lejos de la capital isleña. Por ello, una de las actividades imprescindibles es visitar la fábrica de Arehucas para probar este codiciado ron.
Pero hay mucho más que hacer. Por ejemplo, no puedes perderte la parroquia de San Juan Bautista, cuya construcción, curiosamente, se inspiró en la catedral de Barcelona. La calle León y Castillo es una de las más pintorescas, mientras que la Casa de la Cultura es una visita a considerar si te interesa profundizar un poco más en la vertiente cultural de esta población.
7. Jardín Canario
El Jardín Canario es una explosión de naturaleza, un rincón donde sumergirte en el exotismo de las plantas, flores y árboles originarios de un buen número de partes del mundo. Fundado en el año 1952, este jardín botánico no solo es el más importante del archipiélago canario, sino el más grande de España. Alberga más de 500 especies endémicas.
Durante tu recorrido te sumergirás en un bosque de laurisilva, pero también podrás admirar la magnífica plaza de las Palmeras. El Jardín Macaronésico Ornamental es uno de sus enclaves imprescindibles, pues acoge todas aquellas especies en peligro de extinción de las islas de la Macaronesia, a la que pertenecen las islas Canarias y otras del Atlántico Norte, como las Azores.
8. Parque natural Tamadaba
En el parque natural Tamadaba, situado al noroeste de la isla, los bosques de pinos y los acantilados vertiginosos son los claros protagonistas del paisaje. Es por ello que el senderismo es una de las actividades más populares en esta zona, por lo que, si te entusiasman los planes de naturaleza, cálzate unas cómodas zapatillas de deporte y ponte en marcha.
Este parque natural abarca alrededor de 7500 hectáreas y está declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO. Durante tu excursión, tendrás la oportunidad de sumergirte en el denominado mar de nubes, si te atreves a ascender hasta el pico de la Bandera o a asomarte al mirador de El Balcón para contemplar los acantilados. Prepara la cámara porque este sitio da mucho de sí.
9. Puerto de Mogán
Puerto de Mogán es una población de ambiente marinero y uno de esos rinconcitos especiales en los que apetece perderse un día entero. Alberga algunas de las mejores playas de la isla, todas ellas alejadas de las fuertes corrientes, por lo que son perfectas para familias con niños. Entre las más idílicas está Anfi del Mar, un trocito del Caribe en plenas islas Canarias.
La arena blanca y fina y las palmeras contribuyen a que te sientas en un auténtico paraíso tropical. Además de relax, Puerto Mogán ofrece todo tipo de actividades acuáticas para una jornada de playa muy completa, como kayak o esnórquel. Para poner el broche de oro a un día perfecto, adéntrate en el puerto, flanqueado por coquetas casas de colores.
10. Arguineguín
11. Cueva Pintada
Para aquellos interesados en profundizar en los orígenes de la isla, nada mejor que acudir a la Cueva Pintada, localizada en el término municipal de Gáldar, al norte de Gran Canaria. La visita permite conocer la forma de vida de los aborígenes a través de un recorrido por las pinturas y otros restos arqueológicos. Aprovechando que estás en Gáldar, puedes incluir una excursión a una de las muchas piscinas naturales que hay en la zona.
Una de las mejores es El Agujero, aunque Roque Prieto también te sorprenderá. Ambas permiten disfrutar de un baño refrescante y en calma en las aguas del Atlántico que, en este punto de la isla, es algo más bravo. Pero aquí no hay de qué preocuparse.
12. Reserva natural de Los Tilos de Moya
Si durante tu visita al Jardín Canario te quedaste con más ganas de apreciar la laurisilva en todo su esplendor, en la reserva natural de Los Tilos de Moya tienes la oportunidad de pasear por un auténtico bosque de cuento. La laurisilva, así, te acompañará en cada uno de tus pasos mientras te adentras en uno de los entornos más fotogénicos de la isla.
La reserva natural de Los Tilos de Moya se articula a través de senderos rodeados de vegetación exuberante que, dependiendo de la época del año, cambia sus tonalidades. Es especialmente bella en otoño, por los colores ocres que adquiere. Esta reserva supone una excursión muy agradable y sencilla apta para senderistas de todas las edades.
13. Mirador del pico de los Pozos de la Nieve
¿Estás en busca del mejor mirador de Gran Canaria? No podía ser otro que el mirador del pico de los Pozos de la Nieve, enclavado en la cumbre más elevada de la isla. A nada más y nada menos que 1949 m de altitud, el pico de Las Nieves se alza hasta el cielo en una clara competición con la cumbre más alta del archipiélago canario, la montaña del Teide.
La buena noticia es que este mirador está disponible para todos, tanto deportistas como no, dado que es fácilmente accesible en vehículo. Una carretera sinuosa te trasladará hasta el techo de Gran Canaria, desde el que podrás admirar la puesta de sol más increíble de este viaje. No importa si el día amaneció con nubes, pues estas agregan un encanto adicional a la panorámica.
14. Cenobio de Valerón
Dejamos para el final uno de los sitios más increíbles que ver en Gran Canaria. Para visitar Cenobio de Valerón debemos dirigirnos hasta el municipio de Santa María de Guía. Pero ¿qué es exactamente este lugar? Se trata de una montaña con más de 300 orificios que los aborígenes canarios construyeron con el objetivo de almacenar en ellos cereales y otros enseres.
Es una majestuosa obra de ingeniería que tiene más de 800 años y se mantiene en un óptimo estado de conservación. Sin duda, representa una de las visitas más curiosas de la isla, pues permite aproximarse a los orígenes del archipiélago. Cenobio de Valerón pertenece a la Red de Espacios Arqueológicos de Gran Canaria, de la que también forma parte la Cueva Pintada.
