Hay ocasiones, por las circunstancias que sean, que los destinos vacacionales más populares son también los más caros. Si este año te has propuesto ahorrar, pero te niegas a pasar todo el verano en casa, desde KAYAK te proponemos 10 ciudades alternativas con el mismo encanto y para todos los bolsillos.
Hay muchísimas ciudades que tienen el encanto de París, la historia de Roma o el ambiente de Ibiza, pero que, sin embargo, pasan más inadvertidas a la hora de ser elegidas destinos turísticos. Por lo tanto, son más baratas. Además, en ellas podrás disfrutar de más comodidado al no estar tan masificadas. Todo ventajas.
Viena en lugar de París para comenzar tu búsqueda de ciudades alternativas
París es un icono mundial del romanticismo, pero se ha convertido en un destino caro. Si quieres disfrutar de una ciudad que tenga el mismo encanto para pasar unas románticas vacaciones con el amor de tu vida, Viena, la capital de Austria, es una de las mejores alternativas que encontrarás. La ciudad de Viena posee una arquitectura renacentista y barroca de sus tiempos dorados. Está llena de museos, plazas y jardines para disfrutar de un paseo al caer la noche tras una cena en un restaurante o tomarte un café en una coqueta cafetería. A los vieneses, igual que a los parisinos, les encanta la música clásica y la ópera, por lo que encontrarás una amplia oferta cultural para acudir a teatros a disfrutar de los clásicos en una ciudad que ha visto pasar a grandes autores, como Mozart o Beethoven.
Atenas en lugar de Roma
Roma es un museo al aire libre y un caramelo para los amantes de la historia antigua. Sus precios, sin embargo, pueden ser un impedimento. La mejor alternativa a Roma es, sin duda, Atenas. Atenas tiene todo lo que tiene Roma: buen clima, gastronomía de calidad e historia, mucha historia. Pese a ello, es bastante más barata. Ambas ciudades han marcado el camino de las civilizaciones occidentales, y en Atenas podrás conocer a fondo la historia antigua de Grecia visitando la Acrópolis y los diferentes edificios que la componen, como el famoso Partenón o el templo de Atenea Niké. Estarás pisando el mismo suelo que ilustres griegos como Platón o Pericles pisaron antaño. Para conocer la ciudad más a fondo, visita el Museo de la Acrópolis, situado en la falda de la colina, y termina el día cenando en uno de los restaurantes de la zona.
Menorca en lugar de Palma de Mallorca
Ambos destinos son muy cercanos geográficamente, pero la diferencia económica de viajar a ellas es bastante importante. En Palma de Mallorca encontrarás sol, playas y ocio nocturno para salir a cenar y bailar. En Menorca podrás hacer todo eso sin tener que desembolsar tanto dinero. Menorca es, probablemente, la isla menos visitada de todas las Baleares. Palma de Mallorca está muy masificada e Ibiza todavía más. En Menorca encontrarás una isla pacífica que recorrer a tu aire con un coche de alquiler, mochilas con toallas y cremas solares en el maletero. Es el lugar perfecto para disfrutar de unas vacaciones playeras haciendo paradas en las calas, tumbándose al sol un par de horas y darse un baño en sus cristalinas aguas. Tampoco dejes de visitar sus adorables villas y pueblos tradicionales con mucho encanto o de descubrir la antigua cultura talayótica.
Glasgow en lugar de Londres
Puedes conocer una ciudad alternativa y más barata que Londres sin salir del Reino Unido. Glasgow, en Escocia, tiene mucho del encanto de Londres gracias a sus numerosas edificaciones de la época victoriana. Londres evoca paisajes urbanos nublados, modernismo industrial y cultura alternativa. En Glasgow también encontrarás todo eso. En ella podrás visitar maravillas como la catedral de San Mungo y la necrópolis de la ciudad, donde hay bellas esculturas y mausoleos. Como Londres, Glasgow está lleno de estrechos callejones adoquinados llenos de establecimientos y locales de todo tipo, como tiendas de moda muy curiosas o bares donde tomarse una pinta al ritmo del mejor rock británico. Entre el arte vanguardista de Glasgow, recomendamos que te des un paseo por la ruta de los murales, que cuenta con una guía oficial y supuso en su momento un lavado de cara para la ciudad.
Valladolid en lugar de Madrid
Valladolid como ciudad alternativa a Madrid puede resultar chocante, pero España está llena de ciudades por descubrir más allá de las más típicas y turísticas. Madrid es una ciudad muy vinculada a la historia de la monarquía hispánica y Valladolid comparte mucho de la historia castellana desde los tiempos de los Austrias. Sus palacetes, plazas y otros edificios recuerdan mucho a la arquitectura castellana de Madrid, y su plaza Mayor es una de las más antiguas de España. De hecho, sirvió de inspiración para construir después la plaza Mayor de Madrid. Su centro histórico es un lugar que invita a pasear y perderse por sus calles. Parar en una cafetería mientras observas a los transeúntes pasar para, después, seguir descubriendo la ciudad es un buen plan. La catedral, con su Museo Diocesano, y la universidad, con su hermosa biblioteca, son algunos de los edificios más destacados para visitar.
Valencia en lugar de Barcelona
Cuando pensamos en Barcelona, pensamos en sol, calles llenas de turistas en sandalias y arquitectura modernista. Pero, por muy bien que suene, al estar demasiado enfocada al turismo, la capital catalana puede irse de presupuesto para muchos viajeros. En Valencia podrás encontrar una alternativa prácticamente similar y más barata. Esta ciudad también se encuentra en la costa mediterránea y posee una larga playa urbana donde echar la toalla y tumbarte al sol. Al igual que Barcelona, la arquitectura modernista de Valencia ―especialmente la del centro―, desarrollada a lo largo de los siglos XIX y XX, le ha dado forma a la imagen de la ciudad. La podrás observar en la mayoría de sus edificios institucionales. En Valencia tampoco puedes perderte la famosa Ciudad de las Artes y las Ciencias, un enorme complejo de museos donde aprender de forma divertida sobre ciencia.
Jerez de la Frontera en lugar de Sevilla
Sevilla es una ciudad llena de color, música y arte. Si estás buscando un destino más barato que Sevilla, pero no quieres renunciar a esa característica esencia andaluza y sureña, podemos recomendarte que pases unos días en Jerez de la Frontera. Se podría definir esta ciudad como una Sevilla en versión reducida. En Jerez podrás disfrutar también de espectáculos de flamenco, salir de tapeo y descubrir la arquitectura mozárabe tan propia de la región.
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La Valeta en lugar de Ibiza
Ibiza es uno de los destinos mediterráneos más caros y su homóloga, la isla griega de Miconos, casi aún más. Por ello te proponemos que, si quieres disfrutar del sol y la playa en una isla mediterránea, pases tus vacaciones en La Valeta. La Valeta es la capital de Malta, una ciudad costera con el mismo encanto que la Isla Blanca balear. Ofrece ocio nocturno en el puerto con bares y pubs que cierran hasta tarde y, por el día, hermosas playas donde darse un refrescante chapuzón para escapar del calor mediterráneo.
Las Palmas de Gran Canaria en lugar de Santa Cruz de Tenerife
La alternativa a Santa Cruz de Tenerife se encuentra justo en la isla que se encuentra frente a ella. Las Palmas de Gran Canaria es un destino prácticamente idéntico: una ciudad costera para disfrutar de unos días de sol y playa sin estrés ni preocupaciones. En esta ciudad también podrás visitar edificios y casas de los llamados indianos y pasear por avenidas en un lugar con una temperatura envidiable todo el año.
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Venecia en lugar de Ámsterdam
Si hay algo que caracteriza a Ámsterdam son los canales. ¿Y qué otra ciudad es característica por sus canales? Venecia. En Venecia encontrarás el encanto de lo antiguo y una ciudad repleta de canales para ir a visitar con tu pareja en una bonita escapada. No te pierdas la famosa plaza de San Marcos, aprovecha para conocer su famoso Carnaval, si las fechas coinciden y, por supuesto, no te vayas sin montar en góndola por el Gran Canal.
