Si eres más del océano Atlántico que del mar Mediterráneo y estás buscando unas vacaciones en la llamada «España verde», te puede interesar saber qué ver en Ribadesella. Muchas personas prefieren huir de la masificación de la costa mediterránea y su enfoque turístico para ir de vacaciones a lugares más apacibles y tranquilos donde pasar unos días alejados de lo cotidiano, pasear, relajarse y tomarse un café en agradables cafeterías de encantadores pueblos del norte. Esta localidad de Asturias está hecha tanto para los que buscan contacto con el mar como para los que prefieren la montaña.
Una escapada familiar, una excursión con amigos o un fin de semana en pareja, Ribadesella tiene más potencial del que muchos conocen. Ya sea que quieras tumbarte al sol o que estés buscando planes culturales, aquí lo encontrarás. Descubrir el pasado más lejano de la humanidad escondido en una cueva, recorrer kilómetros y kilómetros por los numerosos paseos que llenan esta localidad o atreverse a descender el Sella en piragua: seguro que hay alguna actividad que te interesa.
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Senderismo por la ruta de los Acantilados del Infierno
No te dejes llevar por el nombre, en realidad se trata de una ruta sencilla y corta. No te debería tomar más de una hora, así que es la actividad perfecta para pasar una tarde. Mete en tu equipaje ropa y calzado cómodo, porque lo necesitarás. La ruta comienza en el área recreativa del pueblo de Cuerres y finaliza en la misma Ribadesella. Esta ruta sigue la línea costera, en ocasiones con un sendero bien marcado y en otras atravesando prados llenos de vacas y cabras. Encontrarás espectaculares imágenes dignas de fotografiarse, como el islote de Palo Verde, especialmente si haces la ruta al atardecer. Más adelante, ya cerca de Ribadesella, hay un mirador desde donde podrás sacar fotos de los Acantilados del Infierno para llevarte recuerdos de este bonito día. Eso sí, si estás con niños, debes ir con mucha precaución.
Descubre la prehistoria de Ribadesella
Conocer el pasado prehistórico de esta localidad es una de las cosas más interesantes que hacer en Ribadesella. Tienes para visitar desde cuevas con arte rupestre hasta huellas de dinosaurio, por lo que Ribadesella se convierte en el destino perfecto para quienes viajen con niños pequeños, grandes amantes de las curiosidades de la prehistoria. La cueva de Tito Bustillo está declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y tiene una de las mejores representaciones conocidas de arte rupestre. Forma parte del complejo artístico paleolítico de Altamira y se puede acceder perfectamente a pie, ya que se encuentra en la propia localidad. Dentro podrás observar diferentes salas con pinturas rupestres que representan figuras animales y rituales, así como las diferentes zonas de actividades del ser humano prehistórico. Para ver las huellas de dinosaurio, debes ir hasta Tereñes, donde encontrarás un yacimiento del Jurásico, con huellas de estas criaturas del pasado.
Un tranquilo paseo por el casco histórico de Ribadesella
Ribadesella es una localidad agradable en la que camuflarse toda una tarde entre los lugareños recorriendo las calles del centro y visitando locales comerciales y cafeterías. En pleno centro de Ribadesella podrás encontrar la imagen de una concha de vieira, pues por aquí pasa la llamada Ruta Atlántica del Camino de Santiago. Este centro histórico, con los años, se ha ido restaurando y peatonalizando para hacerlo más agradable, y en él encontrarás bellos edificios, como el Palacio de Prieto Cutre, que, actualmente, es la sede del Ayuntamiento; la Casa de los Ardines y la Casona del Escudo. La composición de sus calles es irregular, propia del trazado medieval original y, si levantas la cabeza, verás edificios con balcones en voladizo, galerías acristaladas y fachadas con escudos nobiliarios de antiguos linajes familiares. No te puedes perder tampoco una visita a la iglesia de Santa María Magdalena.
Conocer sus famosos tres paseos
Quizá te está pareciendo que Ribadesella es una localidad para conocerla caminando, y no te equivocas al pensarlo. Aparte de la ruta de senderismo por los Acantilados del Infierno y por el casco histórico, Ribadesella tiene tres reconocidos paseos a orillas de la ría. El paseo del Muelle es un tradicional paseo marítimo donde encontrarás numerosas barquitas de madera de los pescadores que salen a faenar, así como otros barcos pesqueros más grandes y veleros, pero también verás gente pasando el rato y pescando desde el propio paseo. Si tienes suerte, también puedes ver a piragüistas entrenando para la competición del Descenso Internacional del Sella. El paseo de la Grúa es otro lugar importante. En él encontrarás paneles del dibujante y humorista Antonio Mingote en los que se repasa la historia de Ribadesella. El tercero es el paseo de los Vencedores del Sella, una especie de paseo de la fama.
Qué ver en Ribadesella: un conjunto de aldeas de cuento
Ribadesella no es solo la propia localidad. Es un concejo que agrupa varios pueblos en un mismo Ayuntamiento, algunos de ellos con un encanto propio de los cuentos legendarios. Estos lugares más tranquilos y alejados del centro urbano de Ribadesella esconden paisajes asombrosos que harían las delicias de fotógrafos y pintores. Encontrarás casas con el estilo tradicional de antaño y otras que son símbolo del pasaje asturiano, como los hórreos, antiguos almacenes alargados construidos sobre pilares donde se guardaban los cultivos para que los ratones y otros pequeños animales no pudiera alcanzarlos, además de mantener los alimentos lejos de la humedad propia del suelo asturiano. Algunos de los pueblecitos encantadores que debes visitar son Tereñes, más conocido por su yacimiento jurásico, o Cueves, al que hay que acceder atravesando una gruta. También te recomendamos Sebreñu, Tezangos o Camangu.
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Practicar surf en la playa de Santa Marina
Al otro lado de la ría, cruzando el puente, se encuentra la playa de Santa Marina. Este lugarposee un largo paseo que data del año 1907 y desde el que podrás contemplar palacetes y casas de estilo indiano. Surgió por orden de la marquesa de Argüelles en su deseo de urbanizar la zona, a la que acudieron numerosos aristócratas de la época a levantar sus residencias. Esta playa se convirtió en el origen del factor turístico de Ribadesella, pues está llena de hoteles y restaurantes en los que podrás degustar los platos típicos de la gastronomía asturiana en terrazas con vistas al mar. Pero el encanto de la playa de Santa Marina no solo reside en darse baños de sol y de agua, sino también en la práctica del surf. La protección en forma de bahía convierte esta playa en una buena opción para los principiantes en este deporte.
Sube hasta la ermita de la Guía
Desde el paseo de la Grúa tienes un acceso que te lleva hasta la ermita de la Guía, a través de un camino escalonado, o bien desde otra senda por el parque de las Atalayas. Esta ermita es un símbolo para Ribadesella. Al estar en lo alto, mientras subes, puedes ir observando las hermosas vistas hacia el mar. Una vez arriba, estarás en la cima del monte Corberu, desde donde tendrás una visión panorámica del entorno. Allí verás la ermita de la Guía, cuya construcción data del siglo XVI. Desde este lugar podrás divisar algunos puntos reconocidos de Ribadesella, como la playa de Santa Marina.
Qué ver en Ribadesella: Baja el Sella en piragua
Uno de los principales atractivos de Ribadesella es el descenso del río Sella en piragua. Es un destino internacional para los deportistas de élite de esta modalidad, pero también es una actividad accesible al público en general. El Sella es un río bastante tranquilo, por lo que puede navegarlo en piragua cualquier persona. Existen empresas que realizan excursiones grupales para descender el río. El alquiler incluye una pequeña clase teórica sobre cómo remar con piragua, prevención de riesgos y una guía detallada del camino que recorrerás. Además, un autobús te llevará hasta la zona donde comienza la ruta, así que no tendrás que preocuparte de cómo llegar hasta el punto de inicio.
