Capital de la región de Campania, Nápoles es una de las ciudades italianas con más encanto. Las callejuelas empedradas e irregulares, y los comercios de toda la vida configuran un destino que siempre llama la atención. Tradicionalmente ligada a la mafia y bajo la custodia del imponente volcán Vesubio, hay mucho que ver en Nápoles y también mucho que decir de esta urbe.
Todo lo que tienes Que ver en Nápoles
En esta ciudad, apetece gastar la suela de los zapatos caminando hasta que el cuerpo aguante. La recompensa la encontraremos en una de sus coquetas trattorias, en las que podrás degustar algunas de las mejores pizzas del mundo. Explora todo lo que te ofrece la ciudad, pero tampoco dudes en acercarte hasta la icónica Pompeya para descubrir una de las historias más fascinantes del viaje.
1. Plaza del Plebiscito

Toda visita a Nápoles debería comenzar en la céntrica plaza del Plebiscito. Se trata de una de las plazas, no solo más grandes de la ciudad napolitana, sino de todo el territorio italiano. En ella se localizan algunos de los principales atractivos turísticos de Nápoles, como es el caso del palacio Real o de la basílica de San Francisco de Paula.
Para los napolitanos, la plaza del Plebiscito es un punto de encuentro, mientras que, para los turistas, es una de las visitas imprescindibles. Circulan varias leyendas en torno a esta plaza que te gustará saber. Por ejemplo, de acuerdo con la creencia popular, la suerte te sonreirá si logras llegar andando con los ojos vendados desde el palacio Real hasta las estatuas ecuestres.
2. Catedral de Nápoles

La catedral de San Genaro es uno de los sitios que sí o sí tienes que ver en Nápoles. Levantada en el siglo XIV, no solo impresiona por su fachada, sino que también el interior te dejará sin palabras. Este templo alberga el denominado Tesoro de San Genaro, compuesto por las reliquias y joyas del patrón de la ciudad.
Si te gusta el arte, prepárate para admirar las suntuosas capillas de la catedral que construyeron las familias nobles de Nápoles. Asimismo, este templo acoge el que está considerado el baptisterio de mayor antigüedad de todo Occidente. ¿Necesitas más razones para incluir la visita a la catedral de San Genaro en tus planes de viaje?
3. Galería Umberto I

Otro de los rincones imprescindibles que ver en Nápoles es la Galería Umberto I. Se trata de una animada calle comercial que recuerda, en cierto modo, a la emblemática Galería de Vittorio Emanuele II, situada en Milán. Arranca en la Via San Carlo, en la que enseguida divisarás su espectacular fachada coronada por una enorme cúpula.
Cuando estés en el interior, tendrás la posibilidad de recorrer sus pasillos de mármol mientras contemplas los escaparates y la riqueza de detalles de este lugar erigido a finales del siglo XIX. A pesar de que hay varios locales que permanecen cerrados, todavía es posible encontrar bonitas cafeterías y establecimientos comerciales.
4. Via Spaccanapoli

Una visita a Nápoles no estaría completa sin pasear por la mítica Via Spaccanapoli, una de las principales calles del centro histórico napolitano. Está repleta de comercios tradicionales, de puestos de frutas y verduras, y de restaurantes de carácter familiar. Simboliza muy bien lo que es el día a día en esta ciudad.
Una de las cosas que más les sorprende a los turistas, no solo de esta calle, sino de muchas otras, es la ropa tendida en los balcones, lo que ofrece una atmósfera muy auténtica. Aunque es peatonal, es común tener que sortear alguna que otra Vespa. Disfruta del paseo en la Via Spaccanapoli mientras te empapas del aroma de la cocina napolitana que sale de los restaurantes.
5. Barrio Español

¿Sabías que Nápoles formó parte de la Corona de Aragón durante varios siglos? Del legado español han quedado rincones tan curiosos como el denominado barrio Español, que rezuma la historia de esta conquista en cada esquina. No en vano, con este nombre se refieren los napolitanos a todo lo que comprende el centro histórico.
Para averiguar dónde queda el barrio Español, puedes tomar como referencia el castillo Nuevo. Uno de sus límites, además, es el puerto, desde donde parten los ferris hasta la hermosa isla de Capri. El barrio Español es una zona de pintorescas fachadas y calles serpenteantes. Una de sus arterias es la Via Toledo, que siempre está atestada.
6. Nápoles Subterránea

Todo lo que hay que ver en Nápoles no está necesariamente sobre la superficie. También hay mucho que visitar en lo que se ha venido a llamar «Nápoles Subterránea». Y es que en el subsuelo te esperan una serie de galerías y túneles que esconden, desde restos arqueológicos de un antiguo teatro romano hasta cisternas, pozos o refugios antiaéreos de la Segunda Guerra Mundial.
Para ello, deberás descender a 40 m de profundidad a través de más de un centenar de escaleras. El recorrido atraviesa pasillos que pueden llegar a ser bastante estrechos, por lo que no es una visita del todo recomendable si sufres de claustrofobia. El acceso para descubrir este mundo subterráneo se realiza por la plaza de San Gaetano.
7. Castillo Nuevo

En Nápoles hay varias fortalezas, pero una de las más impactantes es el castillo Nuevo. De estilo renacentista, fue construido en el siglo XIII y maravilla ya desde el exterior. Tras largos años de restauración, en la actualidad es sede de museo Cívico de Nápoles, por lo que puede ser interesante acercarte para conocer un poco más sobre la historia de la ciudad.
Pero, si por algo el castillo Nuevo es una visita imprescindible para los turistas, es por la espléndida panorámica que ofrece de la ciudad napolitana. Prepara la cámara de fotos, porque el paisaje que podrás ver desde este excelente mirador no te defraudará en absoluto.
8. Via San Gregorio Armeno

No importa la época del año en la que viajes a Nápoles, porque en la Via San Gregorio Armeno siempre es Navidad. Esta icónica calle es conocida por sus coquetos mercadillos navideños, pero también porque está repleta de establecimientos donde es posible adquirir alguna figurita para el belén, aunque sea julio o agosto.
Si buscas un souvenir de la capital de la región de Campania, te animamos a sumergirte en esta calle y a empaparte del colorido y el ambiente que siempre se respira, con independencia de la época del año en la que te encuentres. No en vano, parece ser que la tradición belenística de Nápoles se remonta a hace varios siglos.
9. Basílica de Santa Clara

Nos acercamos al final de esta lista de sitios que ver en Nápoles, pero antes queremos hablarte de la basílica de Santa Clara. Erigida sobre unos antiguos baños de origen romano, es una basílica de estilo gótico que conquista por los innumerables frescos que encontrarás en su interior.
No obstante, cabe señalar que la basílica se ha reconstruido al 100 %, pues fue destruida en su totalidad durante la Segunda Guerra Mundial. Esto no es impedimento para que puedas continuar disfrutando de su belleza arquitectónica, tanto en el interior como en los jardines, que están decorados con vistosas columnas.
10. Pompeya

Aunque Pompeya no está ubicada exactamente en Nápoles, sí está muy cerca y es una visita obligada si estás por allí. Pompeya es una de las ciudades que mejor se conservan de los tiempos del Imperio romano y sobre todo es popular porque se cubrió de lava en el año 79 d. C. debido a una erupción del Vesubio.
Visitarla es casi como viajar en el tiempo. Aún es posible caminar por sus calles y admirar algunos vestigios de la época, como el anfiteatro romano, que acogió tantas y tantas luchas de gladiadores. También está la casa del Fauno, el templo de Apolo y la villa de los Misterios. En definitiva, es un lugar que no puedes perderte si estás de visita en Nápoles.